Se rompen las olas

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Estoy hueca y todos mis hoyos están llenos de polvo, de años. No escucho a nadie, no puedo respirar bien, nunca digo lo que quiero, no veo claro. Nunca he tocado a alguien, no puedo coger bien, tampoco he amado profundamente a alguien. Tengo vacío el corazón. Es que se me están cayendo todas mis casas y soy alérgica al polvo.


“Me llegaron todas las preguntas en un mismo sobre, todas. Este proyecto es una respuesta y una certeza a la pregunta ¿Quién soy?
Nací después del temblor. No lo viví, pero le tengo miedo. He llegado a la conclusión que soy una historia no solo escrita por mí. Todos somos historia, somos suposición, somos investigación, somos desconocidos, somos carne, huesos y tripas, somos memoria, somos parientes, somos fantasía, somos individuos, somos de aquí pero nacimos allá, somos lo no vivido, somos nuevos y viejos en esto, somos consecuencia, somos proyecto, somos reclamos.
Tenemos apellidos y no. Mentimos, aclaramos, reímos, no hablamos, lloramos, comemos, nos alejamos, nos buscamos, entonces… ¿somos familia? Dicen que familia es destino, ¿es?”

Lagartijas Tiradas al Sol, 2012

Se rompen las olas es una obra sobre mí [Mariana Villegas] a partir del terremoto de 1985 en la Ciudad de México, que na- ció de querer construir un relato sólido sobre mi origen, unir las piezas con ayuda de la ficción. Llenar los espacios blancos de mi propia historia con lo que imaginaba ser y lo que me gustaría contar. Me interesaba construir escénicamente una respuesta a la pregunta ¿de dónde vengo?, justificar mi existencia y construir mi versión de una historia que sabía a cuentagotas: la relación de María y Raúl, mis madres, su ausencia y un terremoto.
La intuición de que ese terremoto, sin haberlo vivido, había decretado mi destino. Quería hablar sobre
cómo las catástrofes determinan la vida
de las personas. Quería, tal vez, aclarar y justificar la ausencia, encontrar respuestas en la repetición del teatro. Se rompen las olas era una pieza que vinculaba mi historia personal con un recuerdo colectivo.
La línea de la memoria colectiva, que atravesaba mi historia personal durante la obra, constaba de una serie de documentos relacionados con el
19 de septiembre de 1985, el día del temblor: un video del noticiero Hoy mismo con Lourdes Guerrero, un audio narrativo de Jacobo Zabludovsky, imágenes extraídas de la Hemeroteca Nacional de México y de mi archivo personal. A esto se sumaban textos de Nada, nadie. Las voces del temblor de Elena Poniatowska.
Un escenario de linóleo rojo de 6×4 metros en donde se distribuían los sectores de una casa con un sillón, una mesa, una casita de tela, una mesita y sillitas para niñas. Había juguetes, muñecas, elementos de mi infancia, recuerdos personales, un ventilador, con- chas de mar y una cubeta de escombros. De la parrilla colgaban dos sistemas diseñados para dejar caer uno agua y otro arena. La obra en todo momento estaba apoyada por imágenes proyectadas, fotografías del temblor, familiares y postales de playas. La arena que de inicio simulaba un derrumbe se convertía en una playa, yo bailaba con un hombre imaginario, bebía una Tecate roja en traje de baño, le hacía un reclamo a una fotografía, contaba la relación amorosa de Ma- ría y Raúl en 1985 y la mía, una relación ficticia en 2012 que se interrumpía con un audio del rom- pimiento de olas del mar. Durante el trayecto de ambas relaciones me interesaba hacer un espejo, como repetición de las historias
de las madres y las hijas.
Se escuchaban las canciones “La isla bonita” de Madonna, “Flor de ca- pomo” de Carlos y José, “Dónde te agarró el temblor” de Chico Che y “Me persigue tu sombra” de Chalino Sánchez.

Un proyecto de A project by: Mariana Villegas • Asesoría artística Artistic advisors: Luisa Pardo, Gabino Rodríguez y César Ríos • Video y audio Video and sound: Carlos Gamboa • Iluminación Lighting: Marcela Flores / Sergio López Vigueras • Isadora Isadora: Emiliano Leyva • Asistente Assistant: Hoze Meléndez • Imagen Image: Francisco Barreiro • Producción Production: Lagartijas Tiradas al Sol.

Se rompen las olas fue estrenada el 7 de abril de 2012 en el Teatro El Milagro y fue representada durante seis tempo- radas en la Ciudad de México y en los festivales Santiago a Mil, Santiago; VIE Festival, Módena Radar L.A., Los Ángeles; Teatro a una sola voz, México; Heidelberg Stückemarkt, Heidelberg y Münchner Kammerspiele, Múnich; entre otros.